Procedimiento: Para una tarta utilizaremos un disco de hojaldre de unos 20cm de diámetro. Lo pinchamos con un tenedor bien para que no suba la masa. Pelamos la manzana, la descorazonamos y hacemos láminas con la mandolina. Disponemos las láminas sobre el hojaldre. Pintamos con un poco e mantequilla y espolvoreamos con azúcar granillo. Cocer al horno durante unos 20 minutos a 180ºC. Una vez fuera damos unas pinceladas con la mermelada de albaricoque para que quede brillante.
Para hacer la compota, pela las manzanas, trocea y ponlas en una cazuela amplia. Añade 40 g de azúcar, la rama de canela y un trocito de jengibre. Tapa la cazuela y cocina las manzanas a fuego suave (10-12 minutos) hasta que estén blandas pero que no se deshagan. Retira la canela y el jengibre y deja que se enfríen. Cubre la base redonda de metal (será la que haga funciones de molde) con un trozo grande de papel de horno de manera que sobresalga en 4 centímetros. Espolvorea la encimera con un poco de harina, extiende encima una lámina de hojaldre y estírala bien. Corta una circunferencia, 3 centímetros más grande que el tamaño de la base de la tarta, ponla sobre la base (forrada con papel de horno) y pínchala con un tenedor. Coloca la compota de manzana sobre el hojaldre y recoge los bordes sobre la compota. Bate el huevo y pinta los bordes del hojaldre. Extiende la otra lámina de hojaldre (no hace falta estirarla), corta una circunferencia del mismo tamaño que la base de la tarta, tapa con ella la compota de manzana y hazle un corte en la parte central. Coge un trocito de papel de horno, enróllalo (como un tubito) e introdúcelo en el corte a modo de chimenea. Unta la superficie de la tarta con más huevo batido, espolvoréala con el resto del azúcar (35 g) y hornéala a 200º durante 20 minutos. Baja la temperatura a 165º y hornéala durante 40 minutos más. Retira la tarta, deja que se temple y sirve. Adorna los platos con unas hojas de menta.
Rehogar la cebolleta en el aceite de oliva hasta que quede bien sudada, pero sin coger color.
En un bol poner: la carne de cerdo y de ternera, los huevos, el ajo picadito, el perejil, el pan rallado, la miga de pan y la leche.
Amasar con las propias manos y añadir la cebolleta previamente rehogada.
Comprobar la sal.
Hacer pequeñas bolas de carne y pasar por un poco de harina.
Freír en aceite de oliva muy fuerte de temperatura para que se haga una costra crujiente por fuera y estén crudas por dentro.
Para la salsa
En una cazuela rehogar la cebolleta en el aceite de oliva junto al ajo.
Cuando esté bien sudada: añadir el hongo, rehogarlo un poco y agregar el caldo y el agua.
Dejar cocer durante 20 minutos.
Triturar en batidora de vaso.
Poner a punto de sal.
Introducir las albóndigas en la salsa hasta calentar bien.
Romper una de ellas, ver el punto de cocción y, al final, ligar con un chorretón de aceite de oliva y perejil picado.
Procedimiento: Escalivada: asar todas las verduras ya pringadas de aceite y sal, en el horno a 180ºC hasta que estén tiernas dejarlas enfriar envueltas en una bolsa de plástico, para pelarlas luego más fácilmente. Una vez limpias, rasgarlas en tiras con las manos y meterlas en un bol, aliñándolas con una pizca de aceite de oliva virgen extra Rectificar el sazonamiento y reservar Salsa romesco: Láminas de bacalao:https://mamirecetas.es/salsa-romesco/ Partir en 2 trozos de 125 g el bacalao y meterlos en una bolsa de vacío junto con el aceite Cocinarlos al baño maria a 50ºc durante 8’ Abrirla bolsa de vacío y con cuidado separar el bacalao en lascas, retirando la piel. Colocar en el fondo del plato la escalivada aliñada y sobre ella, las lascas de bacalao tibias desgajadas Acompañar con la salsa romesco
Pelamos las manzanas, las partimos en cuartos y eliminamos la parte central.
A medida que vayamos preparando las manzanas, las colocaremos en un recipiente y las bañamos con un poco de zumo de limón para evitar que se oxiden.
Ponemos la mantequilla en una sartén o una olla a fuego medio.
Cuando tengamos la mantequilla prácticamente derretida, añadimos el azúcar y lo mezclamos
Dejaremos la mezcla de la mantequilla y el azúcar a fuego medio unos 5’ hasta que se caramelice la mezcla. Cuando tengamos el azúcar caramelizado, colocamos los cuartos de manzana apelmazando porque luego se reducen. Dejamos tapado el recipiente y dejamos que se hagan las manzanas unos 10’apagamos el fuego
Encendemos el horno y lo precalentamos a 180ºC.
Dejamos que se enfrié un poco las manzanas y colocamos la masa por encima cubriendo todo el recipiente cortando el sobrante. En el caso que lo hagáis en una sarten cubrir el mango con papel de alumnio.
Metemos la tarta en el horno a 180ºC hasta que la masa se dore.
Sacamos la tarta tatin del horno. La dejamos reposar un minuto y le damos la vuelta con cuidado de no quemarnos con el caramelo.
2 cucharadas de mostaza de frambuesa (hice mezcla de grano con mermelada frambuesa)
4 zanahorias
8 patatas pequeñas
3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 cebolla a juliana
3 dientes de ajo picados finamente
150 ml de vino blanco
150 ml de brandy, coñac o vino de Oporto
Procedimiento: 1. Precalentar el horno a 190º. 2. Salpimentar bien el pollo por dentro y por fuera y con ayuda de un pincel de cocina, pintarlo con la mostaza por dentro y por fuera. Una vez bien salpimentado atarlo con un cordel de algodón: pasar el cordel por debajo, cruzarlo sobre las pechugas y atar las patas una sobre otra de modo que quede bien recogido. 3. Limpiar bien las zanahorias y las patatas quitándoles la piel. Reservar 4. Poner la cocotte al fuego y añadir el aceite de oliva virgen extra. Con el fuego fuerte, Dorar el pollo por todos lados y sacar. Reservar sobre un plato. 5. Dorar en el mismo aceite los ajos y la cebolla a fuego medio. Cuando estén, subir el fuego dorar las zanahorias y las patatas. Añadir el vino y el brandy y dejar cocer a fuego fuerte para que evapore el alcohol. 6. Apartar las verduras a ambos lados de la cocotte y colocar el pollo dentro. Tapar la cazuela y meter en horno precalentado a 190º durante 1 hora y (quizás necesite un poco más de tiempo, pero generalmente, con 1 hora y media queda en su punto). 7. Destapar y encender el grill del horno. Dorar un par de minutos la piel. Sacar de la cocotte, quitar el cordel. Servir con las verduras.
Ingredientes: Almejas Cebolleta Diente de ajo Harina poca Pimentón Guindilla seca Laurel Perejil Vino blanco Sal gruesa Aceite de oliva Sal
Procedimiento: Poner en remojo las almejas en agua con sal unos 10’. Sacar las almejas con una espumadera para no llevarnos la arenilla que pueden haber soltado Lavar bien las almajas en una ola baja con poca agua, y una hoja de laurel Poner a fuego medio tapadas hasta que se abran. Colar el caldo que soltaron y reservarlo. La salsa: Pelar el diente de ajo finito, pelar la cebolleta en brunoise, poner el ajo y la cebolleta con un poco de aceite a fuego medio, una vez este la cebolla transparente, pero sin dorar; incorporar la harina (una cucharadita) y el pimentón, remover hasta que la harina se tueste un poco a fuego bajo, incorporar el vino blanco, remover hasta que se evapore el alcohol, y añadir el agua de la cocción que habíamos reservado. En la olla que teníamos las almejas echar la salsa, espolvorear con el perejil picado, dejar cocinar unos 5’ con la olla tapada. (consejo de Mati: cuanto más se caramelice la cebolla mejor)
Cortamos la parte del tallo de la berenjena. Después la cortamos a lo largo, por la mitad y a cada mitad, le vamos a hacer unos cortes con un cuchillo. Sin llegar a la parte de la piel. Le hacemos unos cortes, primero a lo largo y luego a lo ancho, para obtener al final unos cortes «en forma de rejilla». Las ponemos en el microondas durante unos 8′.
Esperamos que se templen un poco, con una cuchara retiramos la pulpa, manteniendo la cáscara intacta. Al estar parcialmente horneada, se separará muy fácil.
En una sartén grande, ponemos a calentar un chorrito de aceite de oliva a fuego suave. Una vez esté caliente, añadimos los dientes de ajo, la cebolla y el pimiento rojo bien picados. Salpimentamos y dejamos cocinar unos 15 minutos, mientras removemos con frecuencia, añadimos la carne de la berenjena, previamente picada. Incorporamos con el resto de la verdura y añadimos la carne picada. Con la ayuda de una cuchara de madera, vamos desmenuzando la carne, para que no queden mazacotes muy grandes y para ir integrándola con el resto de ingredientes. Cocinamos dos o tres minutos, hasta que pierda el color a crudo
Añadimos el tomate triturado y las cucharaditas de tomillo y romero se puede sustituirlas por una cucharada de orégano. Mezclamos e integramos todos los ingredientes y después, dejamos cocer todo a fuego suave unos 30 minutos. Hasta que se evaporen todo el agua que ha soltado la carne picada y el tomate
Mientras se evapora, preparamos la salsa bechamel. En otra olla alta, ponemos a calentar la mantequilla (puedes sustituirla por aceite de oliva) y una vez se haya derretido, añadimos la harina. Mezclamos y tostamos unos 3 minutos. Esta mezcla, recibe el nombre de «roux». Pasado el tiempo, vamos añadiendo poco a poco la leche. Añadimos unos 200ml y mezclamos, hasta que se integre con la roux. Hecho esto, volvemos a añadir otros 200ml y volvemos a integrar. Repetimos este paso hasta acabar con toda la leche -y lograr una salsa bechamel ligera-. Es entonces cuando añadimos una cucharadita de nuez moscada y reservamos
Cogemos las cáscaras de las berenjenas y las rellenamos con generosa cantidad del relleno que habíamos preparado. Puedes añadir a cada cáscara la cantidad de relleno que quieras. Lo importante es acabar con todo, regamos cada berenjena rellena con salsa bechamel. Finalmente espolvoreamos con queso y rallado y las introducimos de nuevo en el horno, función grill a 200ºC. Las dejamos aquí unos 10 minutos, hasta que el queso se gratine
30 ml de aceite de oliva extra virgen (2 cucharadas)
60 g de mantequilla
1 diente de ajo
2 litros de caldo de carne, o de pollo
12 rebanadas de pan
3 cucharadas de harina de trigo
sal y pimienta negra recién molida (al gusto)
20 ml de brandy o coñac
100 g de queso rallado suave (tipo Gruyère)
procedimiento: Pelamos y cortamos en juliana (a lo largo y en finísimas rodajas) las cebollas dulces. Reservamos en un cuenco. Elegimos una cazuela grande, calentamos el aceite en el fondo de la cazuela. Añadimos la mantequilla, que es la verdadera base de esta sopa francesa. Cuando se haya derretido y mezclado con el aceite de oliva introducimos las cebollas y el ajo muy picadito. Añadimos también un poco de sal y pimienta negra. El efecto salado nos ayudará a que las cebollas suden y que se ablanden antes. Removemos con una cuchara de madera de manera envolvente hasta que la cebolla quede transparente o translúcida, no debe coger color. Este proceso es lento porque queremos tener la cebolla blandita sin que se queme. Con fuego muy suave tardaremos unos 25-45 minutos. Podéis tapar o no la cazuela durante la cocción, aunque si la tapáis el agua que va soltando el sofrito quedará en la cazuela y evitará que la cebolla tome color tostado. Espolvoreamos la harina en la cazuela y removemos con cuidado para mezclarla bien. El efecto de la harina con la cebolla y sobre todo la mantequilla nos ayudará a ligar y espesar la sopa. Añadimos el brandy y dejamos 1-2 minutos que se evapore. Introducimos el caldo, de carne o de lo que más nos guste, pollo, o verduras. Salpimentamos si es necesario y llevamos a ebullición. Dejamos 15-20 minutos a fuego muy suave. La sopa tiene harina y si incrementamos la temperatura se irá al fondo de la cazuela. Se pegará pudiendo llegar a fastidiarnos la receta. Cortamos en rebanadas finas el pan y tostamos ligeramente. Untamos con un trozo de ajo las tostadas espolvoreamos con el queso suave que más nos guste y las llevamos al horno para que se gratinen durante 5-6 minutos Servimos en cuencos la sopa con 2, 3 tostadas por encima.
Procedimiento: Pela las nueces y resérvalas. Pela las peras, retira el corazón y córtalas en daditos. Pon un poco de aceite de oliva en una sartén y cuando esté caliente, pon a fuego medio y añade la chalota pelada y picada. En un par de minutos incorpora las peras y rehógalas hasta que empiecen a estar tiernas, entonces agrega la leche evaporada, la pizca de shichimi (opcional), sal y pimienta negra recién molida. Baja el fuego al mínimo y deja cocer hasta que las peras se deshagan y la leche evaporada espese un poco, entonces pasa la salsa al vaso de la batidora y tritura hasta obtener una salsa fina. Vuelve a pasar la salsa a la sartén y deja reducir unos minutos más incorporando las nueces reservadas. alpimenta el solomillo y hazlo en una sartén amplia con un poco de aceite de oliva. El tiempo de elaboración dependerá de cómo te guste la carne, si quieres conservar el centro rosadito, y claro, dependerá también del grosor del solomillo. Cuando esté en el punto de cocción deseado, vierte en la sartén la crema de balsámico de Módena y haz rodar el solomillo para que se impregne bien. Retira el solomillo del fuego y córtalo en medallones. Sirve la salsa de peras y nueces en la base del plato y dispón sobre ella los medallones de solomillo. Termina decorando el plato con unas gotas de crema de balsámico de Módena.